¿VOTAR O NO VOTAR?

Por: Julio Oliva García
Fuente: www.g80.cl (04.07.08)

El dilema se plantea en mucha gente por estas horas: ¿Votar o no votar?. Mientras algunos hacen “pilatos” por que no se les desmoronen los pactos por omisión, que cada día parecen más lejanos, otros levantan candidaturas alternativas desde el interior del pacto electoral “Juntos Podemos”, por sobre cualquier pacto con la concertación o de forma independiente, pero hay muchos también que están decididos a no votar o anular su voto, para lo que realizan llamados públicos como forma de rechazar toda la politiquería actualmente existente.

Hay razones varias para apoyar cada una de las fórmulas, de hecho mucha gente piensa en el rechazo, sea absteniéndose de votar o sufragando blanco o nulo, mirando la actual realidad de la Ley General de Educación, asumida rápidamente por un acuerdo cupular de la concertación por sobre las exigencias de amplios sectores de la ciudadanía. No ha sido extraño, entonces, escuchar en asambleas de apoderados, profesores y alumnos, la idea de hacer sentir su rechazo en las urnas en octubre próximo, dejando a la vez al descubierto la inmensa crisis que oculta el sistema electoral actual, ilegítimo en su origen constitucional pinochetista, en el cual los supuestos representantes de la ciudadanía terminan defendiendo intereses particulares o de unos pocos, como en el mismo caso de la Educación, donde la denominada clase política tiene vínculos directos con los sostenedores particulares beneficiados por la actual forma de administración educacional.

Mientras, en Santiago y Viña del Mar por ejemplo, los discursos internos en los partidos que pretenden suscribir el pacto por omisión apuntan a hacer digerible el votar por Jaime Ravinet y Antonio Vodanovic, son varias las candidaturas independientes que surgen como alternativa, como la de Ramón Grifero en el mismo Santiago o de otros en La Ligua, Cerro Navia, Quinta Normal, Lebu y La Serena, por nombrar algunos, mostrando el descontento y la real posibilidad de construir desde afuera de los grandes bloques de derecha (alianza y concertación) y de quienes se acercan peligrosamente hacia estos conglomerados.

También existen, desde el interior del pacto electoral “Juntos Podemos”, posiciones contrarias a la omisión, como las del PC Acción Proletaria y de militantes comunistas, humanistas y de la Izquierda Cristiana, que no son posibles de tapar con un dedo y se hacen cada vez más visibles. O, como en el caso de Claudina Núñez en PAC, la posibilidad real de resultar vencedores en los comicios municipales sin necesidad de pacto alguno con la concertación.

Otras iniciativas aun no ven frutos, como la intención de inscribir los partidos Movimiento Democrático de los Pueblos y PASOL, asumidas por el MIR y los deudores habitacionales de ANDHA-Chile a Luchar, respectivamente, pero que han chocado con el alto precio que cobran los notarios para inscribir las firmas requeridas por el Servicio Electoral.

Sin duda que, al pasar de las semanas, el escenario irá aclarándose y tomando formas cada espacio en construcción, pero nada hace dejar de advertir la necesidad urgente de asumir el desafío de la unidad en la diversidad desde todos quienes están dispuestos a asumir la lucha por las transformaciones de fondo que necesita nuestro país. Así lo dejan ver iniciativas como Prensa Libre para Chile, encabezada por Marcel Claude, y el sinnúmero de instancias que se han creado en pos de la voluntad de unir, aunque aun falte generosidad y buena disposición para no seguir objetándose unos a otros, especialmente por que el verdadero motor de todo han de ser el pueblo y los trabajadores, y mientras sigamos mirándonos el ombligo poco habrá que se pueda hacer para cambiar la dirección de los acontecimientos.

¿Votar o no votar? Hoy puede ser aun una elección personal, pero cada día se hace más urgente el que exista una sola palabra y acción para enfrentar a quienes se han asentado en el poder, como bien lo han dejado en claro los estudiantes.

Julio Oliva García
Editorial El Siglo en Huelga